¿Los productos deslactosados hacen daño o son buenos para la salud? Aumenta su consumo en México
Los alimentos deslactosados, específicamente el yogurt, prácticamente duplicaron sus ventas en los últimos cinco años en el país, al pasar de generar ingresos por 2 mil 292 millones de pesos en 2018 a 5 mil 200 millones de pesos al primer semestre de 2023; con un alza del 84 por ciento, según datos de ISCAM, consultora del mercado retail.
El aumento se explica por una mayor demanda del consumidor debido a que los mexicanos encabezan la lista de países con mayor intolerancia a la lactosa.
Para la nutrióloga Alejandra Romero, de Grupo Danone, es necesario identificar, en el caso del yogurt, —que recientemente celebro su día internacional—, qué beneficios puede traer a la salud, y en el caso de ser intolerantes a la lactosa conocer la variedad de productos que existen en el mercado, para que estos traigan beneficios a la salud y no algún malestar.
En entrevista con La Razón, Romero destacó que “existen muchos mitos en torno al yogurt, sin embargo, es un alimento noble y saludable para iniciar el día”.
“Cada 21 de octubre se celebra el día nacional del yogurt. Cada vez son más los nutriólogos que recomendamos equilibrar nuestra dieta con este producto, pese a ser de origen lácteo no tiene el mismo proceso, dado que por su fermentación y bacterias, se vuelve más ligero y ayuda a reforzar nuestro intestino”, dijo.
De hecho, la Academia Nacional de Medicina de México recomienda consumir dos porciones diarias de lácteos, en cualquiera de sus presentaciones, es decir, un aproximado de una taza.
El consumo diario y regulado del yogurt puede aportar diversos beneficios para la salud como:
Romero menciona que, más allá de consumir yogurt y mejorar nuestros hábitos es importante:
El yogurt es un alimento conveniente para todos, además, de que es una buena alternativa para mantener una dieta equilibrada y sana, especialmente en el caso de los intolerantes a la lactosa o al ritmo y estilo de vida que tiene cada persona.
“No importa si lo consumes durante el desayuno, alguna colación durante el día o hasta en la cena, este producto lácteo es muy bueno para prevenir enfermedades cardiovasculares y mejorar nuestro sistema digestivo”, refiere la nutrióloga Romero.
AM
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