Importante señal de urbanidad política como, nos comentan, más debiera haber en estos tiempos, es la que están dando en la alcaldía Álvaro Obregón la alcaldesa aliancista saliente Lía Limón, y el entrante, de Morena, Javier López Casarín. Ayer ambos sostuvieron un encuentro en el que, a pesar de formar parte de agrupaciones políticas contrapuestas, han planteado el acuerdo de llevar a cabo una transición ordenada y bien estructurada. “Se trata de avanzar en el cambio de gobierno y evitar cualquier escenario que perjudique a las y los obregonenses”, declaró López Casarín. En tanto, Limón por su parte sostuvo que no comparte que se pudiera dar una transición atropellada, porque no le hace bien a los vecinos. “Les ofrezco mucha disposición de nuestra parte para ir avanzando y les deseo mucho éxito en su gestión”, sostuvo, antes de instruir a la directora general de Gobierno, Mariana Rodríguez, a ser el enlace con el alcalde electo.
1 2 3 4 5
Comentarios