Iglesia Católica afirma que la eutanasia no es una muerte digna

La Iglesia católica hizo un llamado a los profesionales de la salud y a los legisladores del país a eliminar el dolor, no al doliente, esto a la par de criticar el uso de la eutanasia al decir que no es una muerte digna.

El pronunciamiento de la Iglesia se dio luego de que, en días pasados, la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados realizó una serie de conferencias para hablar sobre la eutanasia, una práctica que hasta hoy está prohibida en México. Durante el programa de conferencias se pronunciaron afirmaciones acerca de que la aprobación de la eutanasia supondría un beneficio económico para el Estado, ya que ahorrará en cuidados paliativos.

En su editorial Desde la Fe, la Iglesia argumentó que existe una tendencia ideológica, ajena a la dignidad humana, que utiliza argumentos sentimentales para equiparar la muerte digna con el asesinato de una persona enferma.

Comentó que, la muerte digna consiste en acompañar a una persona que está terminando su proceso de vida, ya sea por una enfermedad o por la propia edad, con cuidados paliativos; esto es, los cuidados médicos, nutricionales, psicológicos y espirituales necesarios para que esta persona pueda cerrar lo mejor posible su proceso de vida en este mundo, con su familia y seres queridos, y "presentarse ante el Señor".

La Iglesia explicó que, ante el escenario social tan complejo, en el que la vida humana es despreciada por su “inutilidad” o por estorbar a los proyectos y planes de otro, la eutanasia viene a sumarse como una figura más para despreciar la vida del enfermo, ya sea por la incomodidad que genera su cuidado, o por los gastos de ello, o para despreciar nuestra propia vida cuando nos enfrentemos a un proceso de deterioro degenerativo de nuestra salud.

Concluyó que hay posibilidades cristianas de dejar morir a una persona de manera natural, como el rechazar tratamientos innecesarios para enfermedades que ya no tienen remedio humano, pero aclaró que eso es completamente distinto a adelantar la muerte de una persona administrando una sustancia letal. Además argumentó, que está comprobado que cuando una persona enferma no tiene dolor, lo que menos piensa es en adelantar su muerte.

RFH