AMLO designa a Lenia Batres para la Corte; oposición le exige imparcialidad

En un hecho histórico, el Presidente Andrés Manuel López Obrador designó a Lenia Batres Guadarrama como ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), en sustitución de Arturo Zaldívar, quien se sumó al equipo de la precandidata presidencial morenista Claudia Sheinbaum.

Luego de que el Senado de la República no pudo elegir a la ministra, al no alcanzar la mayoría calificada de dos terceras partes para el nombramiento a partir de la segunda terna que envió el Ejecutivo, y después de una reunión privada en Palacio Nacional con las aspirantes Bertha Alcalde Luján, Eréndira Cruzvillegas y Lenia Batres, el mandatario decidió nombrar a esta última, quien es hermana del Jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Martí Batres, además de laborar en la Consejería Jurídica del Ejecutivo federal.

Previamente, durante su conferencia mañanera, señaló que estaba en un predicamento para decidir por alguna de las tres propuestas que hizo al Senado y que, dijo, son mujeres honestas, íntegras y preparadas, pero “no me va a costar (trabajo)” decidirlo.

“Son de primera y tengo nada más que pensar quién puede ser, pero las tres son de primera. Son mujeres con principios, con ideales, están a favor del pueblo, de la justicia, que no están al servicio, como otras autoridades, del Poder Judicial, al servicio de los potentados”, afirmó.

Tras ser designada de manera directa por el Presidente López Obrador, Lenia Batres rindió protesta ante el Senado de la República como nueva ministra de la Suprema Corte, por un periodo de 15 años.

Luego de recibir el nombramiento, el pleno realizó la toma de protesta de ley: “Protesta desempeñar leal y patrióticamente el cargo de ministra de la SCJN que se le ha conferido y guardar y hacer guardar la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y las leyes que de ella emanen, velando en todo por el bien y la prosperidad de la unión”, leyó la presidenta de la Cámara alta, Ana Lilia Rivera.

“Sí, protesto”, respondió. Posteriormente, Batres Guadarrama recibió las felicitaciones de los integrantes de la Mesa Directiva y de la mayoría de Morena.

La madrugada del jueves, luego de dos rondas de votación de las y los senadores presentes en el pleno, ninguna de las integrantes de la segunda terna que envió el titular del Ejecutivo federal alcanzó la mayoría calificada que se requiere para el cargo. La segunda terna, integrada por Bertha Alcalde, Lenia Batres y Eréndira Cruzvillegas, fue cuestionada por el bloque de oposición, debido a la proximidad de las tres con el actual Gobierno de la Cuarta Transformación.

En la primera propuesta que mandó el titular del Poder Ejecutivo a la Cámara de Senadores, Batres Guadarrama quedó en segundo lugar en ambas rondas de votación, donde Bertha Alcalde las ganó, pero sin obtener la mayoría calificada de dos terceras partes, mientras que la consejera jurídica de la Presidencia, María Estela Ríos, se quedó en el tercer sitio.

Lenia Batres era consejera adjunta de Legislación y Estudios Normativos de la Consejería Jurídica del Ejecutivo Federal.

Fungió también como asesora de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda, en la delegación (hoy alcaldía) Tlalpan; directora general de Regulación al Transporte en la Secretaría de Transporte y Vialidad; además, fue directora general jurídica de la delegación Cuauhtémoc.

La nueva ministra estudió Derecho en la Universidad Humanitas; se especializó en derecho penal por la misma institución y realizó una maestría en Estudios de la Ciudad por la Universidad Autónoma de la Ciudad de México (UACM).

Batres integró las dos ternas que envió el Presidente López Obrador al Senado de la República para elegir al sustituto de Arturo Zaldívar; sin embargo, en las votaciones ninguna de las propuestas logró la mayoría calificada requerida por la Constitución para ocupar el cargo de ministro.

La llegada de Lenia Batres como ministra de la Suprema Corte “le cayó como anillo al dedo” al Presidente Andrés Manuel López Obrador en su intención de tener el control total y “obradorizar” al máximo tribunal de justicia del país, aseguraron expertos constitucionalistas, quienes lamentaron esta decisión dado su perfil morenista.

El catedrático de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Francisco Burgoa, aseguró a La Razón que no causó sorpresa la llegada de Batres Guadarrama a la SCJN porque López Obrador apostaba a tener incondicionales para defender su proyecto político, más allá de hacer valer la Constitución o la ley.

“El Presidente tenía perfectamente claro que quería tener a una ministra incondicional que pudiera garantizar esa defensa al proyecto. Al interior de la Corte se van a estar alineando los perfiles, las ideologías de defensa hacia la llamada Cuarta Transformación, con esa expresión muy coloquial y política que causó mucho ruido, de dar esos pasos para seguir ‘obradorizando’ al Poder Judicial”, aseguró.

Burgoa opinó que la designación de Batres “le cae como anillo al dedo al Presidente de la República y nada más faltará un voto, una ministra o ministro para que puedan tener ya los cuatro, y con esos prácticamente van a controlar a la Suprema Corte”.

En tanto, el jurista Javier Martín Reyes, calificó como lamentable la designación, ya que “ésta es una vacante que no le tocaba cubrir al Presidente López Obrador sino a la próxima Presidencia (…) la salida de Arturo Zaldívar, que decidió irse a la campaña de Claudia Sheinbaum y de paso regalarle una designación” al mandatario.

Explicó a este diario que ésta es la primera vez que se tiene una designación directa de un ministro de la Corte, lo cual no ocurrió ni con Vicente Fox, Felipe Calderón ni Enrique Peña Nieto.

“Lenia Batres no tiene una trayectoria destacada ni como abogada, ni como juzgadora, ni como jueza constitucional. Creo que ella tiene una trayectoria abiertamente partidista en el PRD y luego en Morena, y ése no es un perfil adecuado para un tribunal que aspira a ser el árbitro de la democracia”, apuntó.

Martín Reyes consideró que el riesgo que corre la Corte, a partir de malas designaciones, es que se convierta en un órgano partidista donde sus decisiones las tomen a partir de criterios políticos.

La precandidata presidencial de la coalición Fuerza y Corazón por México, Xóchitl Gálvez, acusó que el Presidente Andrés Manuel López Obrador atenta en contra de las instituciones al querer apoderarse del Poder Judicial con la designación de Lenia Batres Guadarrama como ministra.

Luego de que el Ejecutivo federal hiciera la designación directa de la nueva ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), la aspirante presidencial de la oposición destacó que desde el Senado se detuvo otro ataque a las instituciones al no favorecer con sus votos a ninguna de las tres aspirantes a la Corte: Bertha Alcalde, Lenia Batres y Eréndira Cruzvillegas, porque no cumplían con el requisito de independencia.

“La oposición en el Senado volvió a detener otro ataque a las instituciones y ahora pararon un claro intento de asalto a la Corte por parte de un Presidente que quiere apoderarse del Poder Judicial y acabar con el equilibrio de poderes”, dijo la precandidata del PAN, PRI y PRD.

Lamentó que, por primera vez en este siglo, el titular del Ejecutivo federal nombre directamente a una nueva ministra que no cuenta con el aval del Senado, pues subrayó que quienes integraron la terna son abiertamente subordinadas del Presidente y pertenecen al partido Morena.

“Es una militante de Morena, no podemos permitir que la cuarta ministra, el año que entra, la nombren ellos, porque lo que ellos quieren es controlar la Corte. Ellos quieren que desaparezcan estos contrapesos y obviamente yo voy a trabajar con ella, porque finalmente la ley permite que el Presidente nombre a la ministra de la Corte, en este caso a Lenia Batres, pero sí creo que ella tendrá que demostrarle a los ciudadanos que está del lado de la Constitución, que está del lado de los derechos de las personas, del lado de la justicia y no del lado del Presidente”, expresó.

Aseguró que cuando llegue allá, a donde no puede decir, en referencia a la silla presidencial, trabajará con la nueva ministra, hermana del actual Jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Martí Batres, al igual que lo hará con el resto de los ministros, respetando el equilibrio de poderes.

En el evento que encabezó con militantes del PAN, PRI y PRD y con los “Xochilovers” reiteró su crítica por la designación que hizo López Obrador y le advirtió que tiene que aprender que en México existe la división de poderes.

Gálvez consideró que aunque no lo quieran reconocer, el miércoles 13 de diciembre fue un día de fracasos para Morena, porque no logró ratificar a la fiscal de la Ciudad de México, Ernestina Godoy, en el Congreso local y tampoco pudo nombrar a la nueva ministra de la Corte, ante la falta de consensos en el Senado de la República.

“No buscamos el aplauso, sino ser guía, honrar y preservar la justicia”, puntualizó Norma Piña durante la sesión solemne en la que presentó su primer informe de labores al frente del Poder Judicial de la Federación (PJF), a casi un año de haber sido nombrada presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).

“Entre nosotros entendemos muy bien que en la función jurisdiccional no buscamos aplausos, nuestra guía es honrar y preservar la justicia, impartirla con plena convicción, con excelencia, con la mayor firmeza y con absoluta lealtad a nuestra Constitución; ésta es nuestra convicción, es la premisa que da sentido a nuestra vida profesional”, subrayó ante el pleno.

Además, garantizó a los trabajadores del PJF sus derechos laborales, igual que los de todos los mexicanos: “Sepan las y los trabajadores del Poder Judicial que sus derechos laborales, igual que los de todos los mexicanos y mexicanas, serán garantizados en términos del orden legal y constitucional que los ampara”.

Ante representantes del Consejo de la Judicatura Federal (CJF), del Tribunal Electoral, de Luisa María Alcalde, secretaria de Gobernación —quien asistió en representación del Presidente Andrés Manuel López Obrador—; de Marcela Guerra, presidenta de la Cámara de Diputados, y de jueces y magistrados, Piña Hernández destacó “que es un momento de unidad en el PJF y un momento de escucha”.

Apuntó: “La adversidad nos orilla a reafirmar nuestra convicción de servir a los mexicanos con profesionalismo e integridad, sobre todo con un profundo sentido de responsabilidad, desafíos muy significativos y trabajaremos con la mayor tenacidad para defender los derechos de todas las personas, sean mayoría, o minorías; trabajaremos incansablemente para consolidar al Poder Judicial como el contrapeso en un Estado de derecho”.

Enfatizó que la justicia no sólo pacifica el conflicto, sino “también humaniza, edifica y enaltece a la sociedad”, y por ello refrendó su compromiso con la defensa de la independencia judicial y la Constitución.

Desde el máximo tribunal judicial, la ministra presidenta subrayó que el cambio que todos anhelan en la justicia del país, no sólo está en manos del Poder Judicial, tampoco es exclusivo del Ejecutivo ni el Legislativo.

“Estamos ante una responsabilidad de Estado, compartida entre todas las autoridades de los distintos órdenes de gobierno, se requiere convicción, pasión, conocimiento y recursos”, manifestó al hacer un llamado a apostar por trabajar en colaboración con el fin de garantizar el respeto a la Constitución y a la integridad y dignidad de todas las personas.

La ministra Norma Piña Hernández subrayó que el PJF tiene la responsabilidad de administrar sus recursos siguiendo los principios constitucionales de eficiencia, eficacia, economía, transparencia y honradez, sin poner en riesgo la función jurisdiccional. Sin embargo, indicó que desde 2018, el presupuesto para el PJF se ha reducido más de 23 por ciento en términos reales.

La designación de Lenia Batres Guadarrama como ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) atrajo reacciones encontradas de políticos e instituciones.

La Secretaría de Gobernación (Segob) se congratuló por el nombramiento de quien hasta este jueves se desempeñó como consejera adjunta de Legislación y Estudios Normativos en la Consejería Jurídica del Ejecutivo federal.

En el Senado, la presidenta de la Mesa Directiva, Ana Lilia Rivera, pidió a Batres Guadarrama que desde su posición de ministra del máximo tribunal del país no olvide que “México sigue teniendo hambre y sed de justicia”.

“Como lo dije cuando tomó protesta: que cumpla la Constitución y todas las leyes que de ella emanen. Que llegue al Poder Judicial con un profundo sentimiento de responsabilidad con la nación. Que no olvide que México sigue teniendo hambre y sed de justicia”, expresó Rivera.

El coordinador del Partido Acción Nacional (PAN) en el Senado, Julen Rementería, le deseó éxito a Lenia Batres Guadarrama en su nueva encomienda como ministra y le recordó que más allá de sus afinidades, lo importante es que se desempeñe con autonomía e independencia.

“Que haya independencia, autonomía y respeto por el texto constitucional, que es lo más importante, más allá de las afinidades que puede tener cualquiera, la obligación cuando te sientas ahí es cumplir lo justo para lo que fuiste llamado”, apuntó.

El dirigente nacional del PAN, Marko Cortés Mendoza, dijo que nombrar a una ministra afín, militante y sin experiencia, muestra el poco respeto que le tiene Andrés Manuel López Obrador al Poder Judicial y la poca importancia que le da a la división de poderes.

“No podemos permitir que sigan destruyendo la democracia y a nuestro país. Juntos con Xóchitl Gálvez corrijamos el rumbo de México”, agregó.

Por su parte, el dirigente nacional del PRD, Jesús Zambrano Grijalva, consideró que Batres Guadarrama fungirá como empleada del Ejecutivo: “Sin recato alguno y con la mayor desvergüenza Andrés Manuel López Obrador designa a su empleada Lenia Batres como ministra de la Corte”, aseveró.