Mono Blanco lleva sus sones jarochos a Bellas Artes

¿Qué tienen en común Veracruz y Túnez? es una pregunta a la que encontrarán respuestas los espectadores en "El son jarocho y el stambeli", un diálogo entre Túnez y Veracruz, este sábado 31 de agosto en el Palacio de Bellas Artes, un concierto en el que disfrutarán de estas dos traiciones musicales con Mono Blanco y LeoMbri.

“Tenemos una forma de sentir en seis octavos, es la misma forma de sentirlo”, comentó sobre el son jarocho y el stambli, Gilberto Gutiérrez Silva, fundador de Mono Blanco, agrupación veracruzana que ha sido clave en la recuperación del son jarocho y en aportar nuevas propuestas al género.

En el concierto se escucharán temas como “El cascabel” (son jarocho tradicional), “Ali Tango-Malika-Doudou Brahim-Bahryet” (stambeli tradicional); “El Siquisirí” (son jarocho tradicional); “Baile zapateo stambeli” (con el acompañamiento de Leona Gombri percusión venezolana, con arreglo de Omar Sosa); y “El mundo se va a acabar” (Gilberto Gutiérrez Silva); por mencionar algunos.

Gutiérrez Silva señaló que el público será testigo de las aportaciones que ha hecho Mono Blanco, al disfrutar de las canciones que interpretarán.

“Mono Blanco ha seguido siendo propositivo, tenemos dos discos de fusión, hemos propuestos nuevos sones, diferentes orquestaciones, tocamos un son clásico, pero también incursionamos en otras posibilidades que nos permite nuestra cultura musical nacional y del Caribe, eso nos enriquece mucho y nos da muchas oportunidades ahora que estamos explorando, sobre todo, para las generaciones futuras”, dijo.

El fundador de Mono Blanco resaltó que su presentación en el Palacio de Bellas Artes es una muestra más de la manera en que el son jarocho y los fandangos se han expandido a territorios que van más allá de Veracruz, como Puebla, CDMX, Querétaro, Cuernavaca, Guadalajara, Tijuana, Mexicali, San diego, Los Ángeles, San Francisco, Seattle, Nueva York y Chicago.

“Es una cosa increíble cómo el fandango ha transcendido su frontera natural, donde te encuentras una cantidad de soneros, tanto que nacieron jarochos como que nacieron en otros lugares y se incorporan a esta tradición que es bastante abierta e inclusiva. Afortunadamente hay muchos proyectos comunitarios que son los que mantienen la tradición, a diferencia de antes que era cuando se sentaba el niño con el abuelito, ahora se hacen talleres comunitarios”, remarcó.

Asimismo, dijo que otros aspectos que han permitido que la tradición perdure es la incorporación de nuevas propuestas.

“Se ha diversificado tanto el asunto que tienes gente tocando son jarocho y fandangueando. Lo importante de esta época es la presencia del fandango que es el que trasciende fronteras y se va por el mundo; entonces hay una diversidad de grupos, algunos totalmente interesados en la cuestión del fandango, en fandanguear, en tocar los fandangos, los sones tradicionales, los que han caído en desuso, hay otra gente que anda en el asunto experimental, haciendo sonidos muy alejados de lo que es el son, pero lo bueno es que haya búsqueda porque habiéndola va a haber hallazgos”, concluyó.

El concierto será hoy 31 de agosto a las 19:00 horas, en la Sala Principal del Palacio de Bellas Artes.

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