Las 10 mejores películas de 2023 que tienes que ver ya

El 2023 fue año convulsionado por la huelga de guionistas y actores en Hollywood, la discusión de lo políticamente correcto, las producciones de superhéroes en picada y el regreso gris de viejas franquicias, pero con el cine de propuesta siempre estuvo entregando estupendas obras, además de la irrupción de un par de blockbuster inteligentes.

Por ello, aquí te dejamos la lista de las mejores películas de este 2023 que termina, para que las veas en “fa” este Año Nuevo 2024.

Una inesperada comedia sardónica que expone con agudeza los rasgos patológicos de nuestra sociedad actual impulsada por la obsesiva búsqueda de atención y la mitomanía crónica. La agilidad de su desarrollo y la pulcritud de su estética seducen y la hacen sumamente digerible y cercana, lo cual resulta aún más perturbador.

Un drama incómodo y envolvente sobre lo patético del autosabotaje y el egocentrismo creativo, con un sutil delineado de personajes. Pese a no alcanzar del todo el terreno de la ironía que apunta, ofrece un poderoso desarrollo emocional sin aspavientos y con el entorno natural como escenario y amenazador reflejo.

La depurada capacidad en el manejo del lenguaje cinematográfico, la solidez narrativa y la inteligencia a la hora de desarrollar las emociones, aquí sirven para diseccionar y exponer los entresijos de ese espacio de incertidumbre y desinformación que se crea entre los niños y el mundo adulto cuando se internan en el entorno escolar. Una conmovedora y conveniente mirada desde tres perspectivas distintas a un tema poco atendido

Un drama expiatorio e intenso que hace suyo el poderío del IMAX para dimensionar el ímpetu autodestructivo de la naturaleza humana. Sin perder lo más mínimo de contundencia en lo global de su amarga reflexión sobre la creación de la bomba atómica, sabe ser íntimo y contenido cuando es necesario.

Los lineamientos del thriller con todo y asesino serial incluid, aquí son el vehículo para mostrar cómo la teocracia y el fanatismo religioso validan la violencia de género perpetuándose a través de ella. La fórmula entendida y aplicada con lucidez para hacer una brutal declaración social.

No sólo vuelve a sorprender con la animación redefiniendose una y otra vez según el desarrollo de la aventura y el drama, sino que ahora además amplía la conjunción de diferentes estilos para reflejar la personalidad de cada uno de los protagonistas en su respectivo universo, llevando así el concepto arácnido a territorios frenéticos sin que pierda aquello de lo que siempre se ha tratado, la lucha por hacer lo correcto y ser una buena persona.

Con el dictador chileno Augusto Pinochet revelándose como un vampiro, esta es una las películas más atípicas, inteligentes y divertidas que se pudieron ver en el año. La ucronía llevada al extremo por el humor negro, en una espeluznante broma sobre los ciclos sociales de amor-odio que sostienen y derrocan regímenes de monstruos políticos.

El drama que se desborda desdibujando los límites entre lo real y lo fantástico para que la imaginería plagada de personajes insólitos y símbolos a raudales, sea la que diseccione los procesos emocionales que durante la infancia definen lo que seremos como personas y el como decidimos vivir.

La naturalidad en los diálogos, la profunda estilización y la sensibilidad para atender los pequeños detalles de las situaciones, es lo que distingue esta embriagadora evocación que aunque parte de una premisa que ya nos han contado muchas veces, encuentra nuevos y emotivos caminos. Estamos ante una agridulce belleza de profunda humanidad y valioso mensaje con respecto a la infancia y la vocación por enseñar. Pequeña joya del cine mexicano contemporáneo.

Algo de síntesis le hubiera caído de maravilla, pero eso pasa a segundo término ante lo minucioso del desarrollo de las líneas arguméntales y la paciencia con que se estiran los puntos de tensión, lo cual hace que se disfrute hasta lo que podría ser prescindible de las 3 horas y media de este relato acerca de la voracidad sobre la que se cimentó una nación.

Llegó tarde a nuestra cartelera (es de 2021), pero vaya inquietante y contundente forma de ampliar el concepto de los superhéroes y darle la vuelta a los convencionalismos para explorar el mundo infantil, y con lo cotidiano como materia prima llevar la tensión al tope hasta desarrollar una batalla épica en un escenario inusual, el patio de unos multifamiliares.

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