Adriana Ruano da su primer oro a Guatemala en 72 años
En menos de 24 horas, Guatemala ganó dos de las tres medallas olímpicas que tiene en su historia. Adriana Ruano conquistó el primer oro en el magno evento para su país al ganar la prueba de foso femenil de tiro de París 2024 y los centroamericanos superaron en menos de un día la cosecha que habían obtenido en 72 años.
Desde su primera participación en el magno evento, en la edición de Helsinki 1952, Guatemala tuvo que esperar 60 años para su primera presea, la cual llegó de la mano de Erick Barrondo con su plata en la marcha de Londres 2012.
El martes de esta semana, Jean Pierre Brol cosechó el bronce en tiro para darle al país centroamericano su segundo metal olímpico de la historia. Y ayer Adriana Ruano escribió con letras de oro su nombre en el deporte guatemalteco al ser la primera medallista mujer y además darle un inédito oro a su delegación en la decimosexta edición en la que acude Guatemala, menos de un día después del tercer lugar de Brol.
Una grave lesión de columna acabó con el sueño de Adriana Ruano de ser una gimnasta olímpica en el 2011. Trece años después, se presentó a competir como tiradora y se subió a lo más alto del podio en foso femenil de tiro al terminar arriba de la italiana Silvana Stanco y la australiana Penny Smith, quienes se adjudicaron la plata y el bronce, de manera respectiva.
Ruano Oliva, además, se colgó la presea áurea al fijar un récord olímpico al registrar un puntaje de 45 sobre un máximo de 50 disparos en el Centro de Tiro de Chateauroux.
“Me formé en un sistema en el que iba a entrenar gimnasia durante dos horas por las mañanas, luego iba a la escuela y volvía a entrenar por la tarde”, recordó Ruano acerca de su experiencia como gimnasta. “Cuando sufrí la lesión, no tenía nada. Empecé a desesperarme y estaba frustrada. Fue cuando se me abrieron las puertas de este deporte”, agregó la tiradora de 29 años de edad.
Ruano cerró los ojos y respiró profundo antes de acertar su plato 43 para asegurar el oro con cinco disparos por delante. Falló los siguientes dos intentos, pero eso ya no le arrebataba el oro.
“No puedo creer que sea una realidad, estoy muy feliz. Es un honor. No fue fácil llegar acá”, dijo emocionada Adriana Ruano después de su histórico logro.
La italiana Silvana Stanco se quedó con la plata con 40 disparos y la australiana Penny Smith completó el podio con puntaje de 32 para superar por cinco a la española Magrina Molne.
Ruano se entrenaba para el campeonato mundial de gimnasia del 2011, clasificatorio para los Juegos Olímpicos de Londres 2012, cuando sintió un fuerte dolor en la espalda.
Una resonancia magnética indicó que la entonces atleta de 16 años tenía seis vértebras dañadas, una lesión que puso fin a su carrera. Sin embargo, el doctor de Ruano le recomendó competir en el tiro si quería participar de un deporte que no iba a causarle molestias adicionales a la espalda. El consejo del doctor rindió dividendos en París 2024.
No le gustó al principio, pero paulatinamente adquirió pasión por el tiro y por el esfuerzo mental que conlleva su práctica. También le sirvió como una terapia psicológica para olvidar la gimnasia.
“Cuando era pequeña mi sueño era ser gimnasta olímpica. En mi vida me imaginé en terminar en este deporte. Esto fue algo totalmente nuevo”, reconoció la atleta chapina.
El punto de inflexión para que Adriana Ruano se involucrara de lleno en el tiro fue cuando acudió como voluntaria a los Juegos Olímpicos de Río 2016.
“Me tocó y pude ver competir a mis compañeros. Seguí la competencia y fue lo que me dio la inspiración: ‘si no puedo hacerlo en la gimnasia, entonces puedo intentarlo fuera de la gimnasia”, señaló.
Ruano se clasificó a los Juegos de Tokio 2021 y quedó en el último lugar entre 26 participantes. El golpe fue más doloroso, porque días antes del inicio del evento había muerto su padre Luis Ruano, a quien le dedicó su histórica medalla en París 2024.
“Esta medalla va con dedicatoria especial a mi papá. Es mi angelote en el cielo”, concluyó llena de emociones Adriana Ruano Oliva.
José Maligno Torres
Como tantos otros niños en Argentina, José Torres sólo quería jugar al futbol hasta que las piruetas de un rider de una bicicleta BMX lo eclipsaron.
A sus 29 años de edad, el Maligno alcanzó la gloria como campeón olímpico en la categoría park del BMX freestyle de París 2024, tras completar una sublime primera tanda que alcanzó para resistir lo mejor del campeón mundial británico Kieran Reilly y la estrella francesa Anthony JeanJean.
Fue la primera medalla para su país en esta edición de los Juegos y la segunda para el BMX freestyle latinoamericano tras la plata obtenida por el venezolano Daniel Dhers en Tokio 2021.
El rider recibió un puntaje de 94.82 por parte del jurado en su primera salida de la final en el parque urbano de La Concordia, que resultó invencible para sus rivales.
1 2 3 4 5
Comentarios