Va AMLO a reunión con Biden con altas expectativas centradas en migración
- Por Redacción
El Presidente Andrés Manuel López Obrador buscará este martes que Estados Unidos abra sus fronteras a más migrantes, pero además que les garantice seguridad social y salarios dignos.
Con altas expectativas en poder alcanzar acuerdos con ese país en el tema migratorio, el mandatario mexicano viajó ayer a Washington, donde realizará una gira de trabajo de dos días, en la que está previsto un encuentro hoy con el presidente Joe Biden.
Como parte de su agenda de trabajo, se encontrará primero con la vicepresidenta Kamala Harris, con quien busca crear sinergias para impulsar la defensa de los derechos humanos de los migrantes.
Más tarde, López Obrador se reunirá con Biden en la Casa Blanca. Ambos estarán acompañados por sus respectivas esposas, Beatriz Gutiérrez Müller y Jill Biden, pero una vez realizada la recepción, las primeras damas se retirarán para desahogar una agenda particular, en la que resalta el tema educativo.
Los mandatarios abordarán en privado temas como migración, combate a la inflación, cooperación para el desarrollo y seguridad.
Para López Obrador, el fenómeno migratorio es uno de los temas más importantes de la agenda bilateral y está íntimamente ligado con la cooperación para el desarrollo no sólo de México, sino de Centroamérica. Está convencido de que, si se invierte en programas productivos en América Latina, se crearán vínculos de apego y la población ya no se verá obligada a emigrar en busca de oportunidades.
“Si queremos enfrentar la crisis económica, tenemos que producir. La inflación puede originarse circunstancialmente por la pandemia, por la guerra, pero, en lo estructural, tiene que ver con la falta de producción. Entonces, ¿cómo se produce, si no hay fuerza de trabajo? ¿Por qué negar que hace falta fuerza de trabajo, que hacen falta trabajadores?”, explicó, durante su conferencia matutina.
En este tema sobresale la petición que hará México para que se amplíe a 300 mil visas de trabajo, de las cuales la mitad serían para migrantes mexicanos y el resto para quienes llegan de otras latitudes.
Sin embargo, el Presidente se negó a confirmar la petición que se formulará a Washington y sólo aceptó que será un tema que estará sobre la mesa.
“Y sí, vamos a tratar el tema migratorio, pero ya ustedes saben cuál es nuestra propuesta. Nosotros lo que queremos es que la migración no sea forzosa, nosotros queremos que la migración sea opcional y, desde luego, legal, completamente legal, y que se llegue a un acuerdo en ese sentido. Ordenar el flujo migratorio, legalizarlo, tanto para los que ya están allá, que trabajan honradamente, viven en Estados Unidos, contribuyen al desarrollo de esa gran nación, como los que por necesidad tienen que ir a Estados Unidos”, explicó.
Otro tema que también acaparará un importante espacio en el encuentro bilateral es la cooperación en un plan antiinflacionario, mediante el que se impondrían medidas para controlar los precios.
“Vamos también a tratar el tema inflacionario; es un asunto mundial y podemos cerrar filas, trabajar de común acuerdo para controlar la inflación en Estados Unidos y en México, también con medidas bilaterales”, enfatizó el mandatario.
En materia de seguridad, la conversación girará en torno al nuevo esquema Entendimiento Bicentenario, que sustituyó al Plan Mérida, porque este último generó que se vulnerara la soberanía nacional.
“Como sucedió cuando de manera deliberada, en un programa llamado Rápido y Furioso, se permitió la entrada de armas de EU; esto, en un acuerdo entre los gobiernos. Y esas armas causaron daños, pérdida de vidas humanas”, recordó.
Lo que también reconoció López Obrador es que agentes norteamericanos continúan realizando labores de inteligencia en nuestro país, sólo que ahora lo hacen controlados por la nueva Ley de Seguridad Nacional, lo que limita su actuación.
A su llegada a Washington, el mandatario se hospedó en un hotel cercano a la Casa Blanca y no en la representación diplomática mexicana, porque el embajador Esteban Moctezuma contrajo Covid-19.
“A mis paisanos en Estados Unidos: ya estoy hospedado en Washington. Les mando un saludo cariñoso. Mañana, en la Casa Blanca, los defenderé como siempre y recordaré que los migrantes —de cualquier lugar del mundo— son seres excepcionales que con arrojo se abren paso y trabajan dura y honradamente para mantener a sus familias aquí y allá”, refrendó.
La Confederación Patronal de la República Mexicana afirmó que la reunión que se llevará a cabo entre Andrés Manuel López Obrador y Joe Biden, debe traducirse en resultados concretos que fortalezcan la relación bilateral y los temas de agenda pública común.
Expuso que el encuentro es positivo, “sobre todo, a raíz de la ausencia del mandatario mexicano en la Cumbre de las Américas. Esperamos que de la reunión deriven acciones que fortalezcan el compromiso de ambos países en las diversas esferas de lo económico, lo político y lo social”.
La cúpula patronal confió en que el diálogo de primer nivel contribuya a construir la confianza que atrae inversión y a robustecer el entretejido de los lazos de unión en lo económico, lo político y lo social para lograr las transformaciones y los grandes cambios que se necesitan en la frontera compartida entre México y Estados Unidos.
Las propuestas que se han planteado para regular el flujo de migrantes, como son incrementar el número de solicitudes de asilo, ayudas humanitarias y visas laborales, que se plantearon en la Cumbre de las Américas del mes pasado en Los Ángeles, son importantes pero insuficientes, consideró José María Ramos, investigador de El Colegio de la Frontera Norte (Colef).
El investigador comentó que las crecientes detenciones de migrantes irregulares en México son efecto de las necesidades de los extranjeros, en particular los originarios del triángulo norte de Centroamérica —Guatemala, Honduras y El Salvador—, aunque también se ha detectado 45 por ciento de otros, provenientes de Haití, Venezuela y Cuba.
La Razón informó este lunes que mayo constituyó el pico de capturas en lo que va del año, con más de 35 mil aprehensiones de personas migrantes.
El especialista resaltó que se requiere generar empleos en los países expulsores; sin embargo, acentuó que esas naciones no han sido capaces de generar trabajo y, de hecho, les conviene que las personas dejen su país de origen porque supone el envío de mayores remesas.
Ramos insistió en que, en la medida que estos países de Centroamérica no refuercen sus economías para generar ciertas opciones laborales, esta situación continuará.
“Esto explica que México sea el segundo gran receptor de divisas a nivel internacional el año pasado. El país recibió cerca de 54 mil millones de dólares de remesas internacionales, superando incluso a China... es un mal necesario”, opinó.
Personal que labora en albergues que atienden a los migrantes en el norte de la frontera, quienes pidieron omitir sus nombres, comentaron que el incremento en las detenciones se da a partir de que empezaron a abrirse las fronteras y que las personas ya están vacunadas contra Covid-19.
“Toda la gente que no salió por la pandemia empezó a hacerlo; a eso le agregamos la presencia de personas venezolanas en este año y haitianas a finales del 2021… Tenemos varios flujos que se acumulan”, ilustraron.
Expresaron que también se agrega la presión que hizo el gobernador de Texas, Greg Abbott, así como el aumento de elementos de la Guardia Nacional y del Ejército, a los que se han sumado las policías municipales y estatales en la frontera norte de México.
“Tenemos un problema estructural regional... El inconveniente no recae en los migrantes; (ellos) son la consecuencia de un conflicto estructural que impacta a la zona, que tiene que ver con el incremento de la violencia”, expusieron.
Recordaron que cuando el Presidente Andrés Manuel López Obrador propuso llevar programas como Sembrando Vida a países de Centroamérica y con esto frenar la migración, es ver esta situación desde una arista, que no lo es todo.
“No es solamente generar oportunidades laborales; también salen por varios factores… mientras no exista un estado de derecho, democracia, combate a la violencia, la migración es una consecuencia y se pretende parar una problemática frenando la consecuencia.
“¿Qué se tendría que hacer? Mejoramiento de las instituciones de cada país expulsor y, al mismo tiempo, tener políticas migratorias menos militarizadas, eliminando la criminalización de los migrantes”, apuntaron.
El grupo parlamentario del PRI en la Cámara de Diputados solicitó al secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard Casaubón, que informe sobre los acuerdos que México buscará con Estados Unidos, sobre la agenda migratoria, así como un informe acerca de la tragedia migrante Texas.
A través de un punto de acuerdo presentado por Sofía Carvajal, María Elena Serrano y Mariano González, señalaron que es de suma importancia conocer los acuerdos a los que se llegarán durante la reunión que el Presidente Andrés Manuel López Obrador sostendrá hoy con su homólogo estadounidense, Joe Biden.
Asimismo, pidieron al canciller que presente un informe detallado ante la Comisión Permanente, sobre los hechos ocurridos el 27 de junio, cuando un tráiler que transportaba decenas de migrantes fue abandonado en San Antonio, Texas, donde 53 murieron.
En ese sentido, también señalaron que se deberá dar a conocer cuáles serán las garantías de no repetición que se llevarán a cabo en México, para asegurar que una tragedia así no ocurra nuevamente.
“Es importante subrayar (que) los mexicanos que se arriesgan por llegar al vecino país del norte, es para buscar una vida mejor para sus familias, para enviar a sus hijos a la escuela, ayudarlos a salir adelante y tener un futuro mejor”, apuntaron los legisladores.
Apenas el 3 de julio anunciaron que solicitarían la comparecencia del canciller para que explicara las medidas a tomar sobre el tema, pues atribuyeron la crisis migratoria y sus derivados a una falla de seguridad.
Al respecto, la semana pasada se realizó el VII Congreso Latinoamericano y Caribeño sobre Trata de Personas y Tráfico de Migrantes, organizado por el diputado del PT, Reginaldo Sandoval, en el que se reveló que esta práctica dejó 615 millones de dólares de ganancia a las bandas criminales en el 2019.
El senador demócrata de Estados Unidos, Bob Menendez, demandó que durante la reunión que sostendrán hoy los presidentes Joe Biden y Andrés Manuel López Obrador, uno de los temas que deberán abordar es lo que calificó como “erosión democrática de México”.
El presidente del Comité de Relaciones Exteriores del Senado estadounidense aseguró que existe una “preocupación” en temas como la libertad de prensa, la independencia judicial y la militarización que registra México, elementos que, dijo, son indispensables para que una nación sea gobernada democráticamente.
En una rueda de prensa, el representante de New Jersey dijo que “entre buenos amigos, uno puede tener discusiones honestas sobre la preocupación que yo y otros tenemos sobre la erosión de los pilares de la sociedad civil en México”.
Entró en conflicto con el Presidente López Obrador desde hace algunas semanas, cuando el mandatario mexicano acusó al legislador de origen cubano de haber chantajeado al mandatario Biden con impedir que se aprueben leyes si se consideraba invitar a los presidentes de Cuba, Venezuela y Nicaragua a la novena Cumbre de las Américas.
En el Senado de Estados Unidos, la paridad entre los partidos Republicano y Demócrata le da a Menendez una posición de privilegio, pues su voto puede inclinar los resultados a un lado o al otro.
Ahora, Bob Menendez dirigió sus baterías contra lo que considera son riesgos en el ejercicio periodístico, la falta de independencia del Poder Judicial y que se esté utilizando cada vez más al Ejército en labores que no corresponden a sus facultades.
Con información de Ivonne Martínez, Daniela Wachauf y Yulia Bonilla
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