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Sin condiciones, 2ª vuelta en comicios

Expertos coincidieron en que “no es momento” para este tipo de procesos en el país, además de que consideraron que su aplicación resulta costosa e innecesaria
  • Por Redacción

En México no existen las condiciones para la ejecución de una segunda vuelta en la elección de poderes ejecutivos y legislativos, como lo propuso el PAN, opinaron expertos en la materia que participaron en el segundo foro de parlamento abierto de la Reforma Electoral.

Javier Aljovín, consultor y observador electoral; Jaime Cárdenas, exconsejero electoral, y Javier Rosiles, académico de la UAM, coincidieron en que “no es momento” para este tipo de procesos en el país, además de que consideraron que su aplicación resulta costosa e innecesaria, ante la baja participación ciudadana.

Entre los puntos expuestos, los especialistas también sugirieron que la fiscalización de los partidos debería ser una tarea compartida entre el Instituto Nacional Electoral (INE) y organismos como la Unidad de Inteligencia Financiera o la Comisión Nacional Bancaria de Valores, así como sugerir que las donaciones a campañas se efectúen mediante transferencias bancarias.

Jaime Cárdenas dijo que, aunque las segundas vueltas pretenden dar legitimidad a las elecciones, también reduce el pluralismo político al concentrar la competencia en dos polos (partidos), por lo que se forzaría al electorado a elegir entre dos opciones con las que podría no compaginar.

Javier Rosiles opinó que una segunda vuelta sería el único mecanismo por el cual la oposición podría ganar a Morena en 2024, y es la razón por la cual no estuvo incluida en la iniciativa enviada por el Presidente Andrés Manuel López Obrador.

Por el contrario, Arturo Ramos, profesor en Derecho Electoral, planteó su postura a favor de la segunda vuelta, pero con reservas, pues sugirió que deberían ser consideradas como una especie de seguro, para que así sean aplicadas sólo en escenarios donde se carezca de legitimidad.

También propuso que las sanciones a partidos políticos que incurran en faltas no se reduzcan a aspectos económicos, sino que se considere la pérdida de curules en el Congreso.

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