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“Investigación se perdió con un golpe de timón”

El líder del Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan denuncia represión hacia padres de los 43; será difícil dar con la verdad sin la cooperación de las víctimas, dice
  • Por Redacción

La investigación del caso Ayotzinapa se “perdió” en el momento que se dio un “golpe de timón” con las renuncias del subsecretario de Gobernación, Alejandro Encinas Rodríguez, y del fiscal de la Comisión Especial, Omar Gómez, a pesar de que el Presidente Andrés Manuel López Obrador se comprometió a dar con el paradero de los 43 estudiantes.

Así lo afirmó Abel Barrera, líder del Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan, quien denunció que el mandatario federal en el último año se dedicó a denostar a los padres y madres de familia de los jóvenes, así como a sus abogados.

“Empezó una denostación contra organismos internacionales y más bien empezó a plantear una hipótesis de que había una conspiración internacional contra el ejército, entonces, se perdió la investigación, los padres se quedaron totalmente desconcertados, se preguntaron y qué pasó con nuestros hijos, dónde están las líneas de investigación, dónde están todos los avances que se habían logrado.

“Más bien se dio un golpe de timón que descarriló todo, y el mismo Presidente asumió la investigación, el fiscal quedó en segundo plano, el nuevo fiscal que se nombró (Rosendo Gómez); dejó de ser una investigación independiente”, aseguró en entrevista con La Razón.

Indicó que el mandatario federal trató de armar su propia narrativa dejando de lado los seis informes del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI), los que publicó el subsecretario Encinas, y “nunca ha tomado en cuenta el informe de la ONU sobre la práctica de la tortura contra los detenidos, mucho menos tomó en cuenta los informes que también sacó la Comisión Interamericana de Derechos Humanos”.

Barrera Hernández comentó que será difícil encontrar la verdad sobre la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa si no hay voluntad política y un compromiso con las víctimas de llegar al fondo del asunto.

“El otro tema es que a las víctimas se les ha dejado en segundo plano, se hacen más cálculos políticos para poder tomar ciertas decisiones y quienes han sido víctimas de violaciones a derechos humanos han quedado relegadas, a pesar de que deben estar en el centro de la acción política”, dijo.

Sobre las expectativas en la Presidenta electa, Claudia Sheinbaum, para aclarar el caso Ayotzinapa, opinó que en la reunión con los padres y madres mostró voluntad, apertura, sensibilidad, compromiso, y los padres han depositado, por el momento, esa confianza, pero falta trazar un mecanismo, ver cuál se puede implementar.

“Obviamente que sí están a la espera, tienen altas expectativas, aunque también sus reservas porque ya tuvieron la experiencia con el Presidente Andrés Manuel de que hubo un compromiso claro, abierto, público de que se encargaría de investigar y dar con el paradero de sus hijos”, estableció.

Asimismo, Abel Barrera se pronunció por la desaparición de la Comisión de la Verdad creada por el Presidente de la República para el caso Ayotzinapa, pues dejó de ser útil en las investigaciones, “dio lo que tenía que dar”.

Planteó que la próxima mandataria, junto con los padres y las madres de los estudiantes desaparecidos, busquen un nuevo mecanismo independiente de Gobierno, en el que puedan tener asistencia técnica de organizaciones internacionales.

“Los mismos padres tomaron la decisión de ya no asistir a las sesiones que había en la COVAJ, quiere decir que ellos ya no ven viable este espacio. Creo que va a ser necesario imaginar que otro mecanismo pudiera implementarse para dar continuidad al trabajo de investigación que se había avanzado, que sea independiente, coadyuve con las autoridades encargadas de investigar, igual con el apoyo internacional que ha sido clave”, añadió.

También pidió que el expresidente Enrique Peña Nieto sea llamado a declarar ante la Fiscalía General de la República (FGR), dada su participación en el ordenamiento de crear la llamada “verdad histórica” de que los jóvenes habían sido incinerados en el basurero de Cocula por un grupo criminal de Guerrero.

“Él también jugó un papel de encubrir a los responsables de asumir esa versión de la verdad histórica sacrificando la verdad científica, y ante todo criminalizando y estigmatizando la lucha de los estudiantes y fabricando esta versión que no tuvo sustento. Muchas autoridades no han sido llamadas para declarar ministerialmente sobre cuál fue el papel que desempeñó para que se cubriera a los responsables, y en este caso se urdiera la verdad histórica”, puntualizó.

Barrera explicó que en las indagatorias aún faltan los 800 folios solicitados a la Secretaría de la Defensa Nacional, por parte de los familiares de los normalistas desaparecidos.

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