Ebrard rechaza pactar con criminales; pide a su partido "fijar reglas" rumbo al 2024
- Por Redacción
Marcelo Ebrard Casaubon, secretario de Relaciones Exteriores de México, sostuvo una charla con el periodista Jon Lee Anderson en el marco del festival Dromofest 2022, donde abordó algunos de los temas políticos más relevantes del momento, como la elección del candidato de Morena para la elección presidencial de 2024 y el polémico planteamiento de Manuel Espino, excomisionado nacional de Seguridad Pública, relacionado con "pactar con grupos criminales".
Sobre este punto, el canciller externó su rechazo al señalar que él “no estaría de acuerdo” con pactar con grupos criminales para pacificar el país porque dijo, estos grupos “ya han cometido muchos delitos” y un acuerdo implicaría “fijar una salvedad a la ley”.
En cuanto al diferendo entre la gobernadora de Campeche, Layda Sansores y el senador Ricardo Monreal, dijo que en todas las competencias políticas hay tensión. No obstante pidió a la “dirigencia de Morena” que fije “con claridad reglas equitativas y respetuosas, y hacerlas valer”.
“Si hay un ataque de una persona contra otra, que está usando bots, te habla el partido y te dice ‘oye no se puede, mano’. En fin, fijar reglas. Si no hay eso puede haber mucho conflicto”, expresó.
En cuanto a sus correligionarios-rivales dijo que “yo la respeto a ella (Claudia Sheinbaum), la conozco hace mucho tiempo; fuimos compañeros en el gobierno de Andrés, en el 2002 a 2005; Adán también es un muy buen tipo”, añadió.
El secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, compartió su proyecto político presidencial, en el que si bien buscaría consolidar la administración obradorista, también cambiaría en algunos rubros, como en el de la implementación de un sistema universal de salud o en materia educativa.
El canciller, Marcelo Ebrard, se mostró abierto a la posibilidad de legalizar la marihuana en México: “Simpatizaría con esa idea”, señaló.
Sin embargo aclaró que el impulso sería a través de los congresos estatales, en una ruta similar a la que siguió la despenalización del aborto.
Al rechazar las acusaciones en torno a la militarización del país, Ebrard Casaubon recalcó que la entrega de tareas civiles al Ejército responde a “necesidades de corto plazo… de tal manera que llega un momento que los civiles regresen a estas actividades, quizás en un futuro”.
“La pregunta no es ¿por qué la Marina maneja puertos?, sino ¿por qué los civiles no lo podemos manejar?”, dijo el canciller.
“No creo que el presidente esté concibiendo una sustitución de la administración civil por una administración militar. Esto no existe, yo estoy ahí todos los días, lo veo, no es así””, explicó.
“Las Fuerzas Armadas han estado participando en la confrontación con el crimen organizado, y esto se debe a que el crimen organizado tiene un poder de fuego muy grande, y una presencia cada vez más relevante”, dijo sobre el papel de las Fuerzas Armadas en tareas de seguridad pública.
Al abordar temas de política exterior, Marcelo Ebrard destacó la neutralidad del país ante conflictos internacionales como la cada vez más aguda relación entre Estados Unidos y China.
Recordó que México tiene una “buena relación” con China pero también “valores democráticos”, y que el grueso de sus intercambios se hacen con Estados Unidos.
“Esperaría que no tengamos en el futuro una situación como la que tuvimos en la Segunda Guerra Mundial, donde tienes que escoger el bando porque ya no te queda de otra, en un conflicto bélico”, subrayó.
El titular de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard Casaubon dijo que el gobierno de México busca una relación más horizontal con Estados Unidos y ejemplificó con el reclamo al vecino país por la venta de armas.
Se pronunció por una relación a futuro, pero sin caer en constantes diferencias. Una relación donde “la DEA es un disruptor permanente”.
Finalmente, al preguntarle por la posición del gobierno mexicano en torno a los gobiernos de Venezuela, Nicaragua y Cuba, reiteró la postura de no intervencionismo y sostuvo que México nunca apoyará un golpe de Estado.
“A Nicaragua le hemos dicho ‘oye, estamos muy preocupados’. Saben que nos preocupa muchísimo que pasen estas cosas. Tenemos una opinión, pero no podemos intervenir”, acotó.
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