Aumenta alerta por actividad del Popo; arrecia la caída de ceniza

Ante el incremento en la actividad del Popocatépetl, las autoridades determinaron elevar el nivel de alertamiento, que pasó ayer de Amarillo Fase 2 a Amarillo Fase 3, apenas un peldaño abajo del nivel de alerta roja de peligro volcánico intermedio a alto.

“Después de revisar lo establecido por el Semáforo de Alerta Volcánica, en sus diferentes fases, el Comité Científico Asesor (CCA) del volcán Popocatépetl llegó a la conclusión de hacer la recomendación correspondiente para cambiar el nivel de Amarillo Fase 2 a Amarillo Fase 3”, indicó la titular de la Coordinación Nacional de Protección Civil (CNPC), Laura Velázquez Alzúa.

En conferencia de prensa desde el Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred), aseguró que, pese a este cambio, no existen riesgos para la población ni necesidad de evacuación, y aseguró que se mantiene la vigilancia del volcán a través del monitoreo las 24 horas del día, los siete días de la semana.

“No existe ningún riesgo para la población en este momento, se está presentando (la nueva fase del semáforo) por estas exhalaciones, es la caída de ceniza”, declaró la funcionaria.

Dijo que, pese a que ya no existe el Fondo de Desastres Naturales (Fonden), no tienen límites de recursos para atender a la población que en algún momento así lo requiera y existen refugios temporales.

Respecto al tema de las afectaciones a la aviación, Velázquez Alzúa puntualizó que no se puede anticipar, sino que es un asunto que se tiene que “estar informando cada minuto”; sin embargo, destacó que este domingo se encontraban operando de manera regular el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) y el Aeropuerto Hermanos Serdán de Puebla.

Explicó que los investigadores del CCA llegaron a la conclusión de recomendar el cambio de nivel en el Semáforo de Alerta Volcánica a Amarillo Fase 3, después de evaluar la evidencia científica de la actividad general de Don Goyo, que ha mostrado un aumento gradual y cambios en su comportamiento con respecto a etapas pasadas, comparable a 2012, 2013 y 2019.

Indicó que los parámetros para la Fase 3 del Semáforo incluyen actividad eruptiva de explosividad baja a intermedia; explosiones leves a moderadas que lancen fragmentos en el entorno del cráter; lluvias de ceniza leves a moderadas; afectación a la navegación aérea; crecimiento importante de domos y posibilidad de expulsión de magma, así como explosiones de intensidad creciente que lanzan fragmentos a distancias considerables.

El Semáforo de Alerta Volcánica está conformado por tres etapas, de las cuales la primera fase, que es la de normalidad, está marcada por el color verde, con dos etapas, que contemplan a un volcán en calma o con manifestaciones mínimas.

La siguiente etapa es la Fase Amarilla, de alerta, con tres etapas: la primera, con manifestación de actividad; la segunda, con un incremento de actividad, y la tercera, con actividad intermedia alta, que es en la que actualmente se encuentra el Popocatépetl.

La tercera etapa, en rojo, advierte alarma y riesgo para la población, y contempla dos fases: la primera, actividad explosiva de peligro intermedio a alto y, la segunda, actividad explosiva de peligro alto a extremo.

Pese a que el Popocatépetl se encuentra a sólo una fase de la alerta en rojo, Velázquez Alzúa remarcó que no es necesaria la evacuación todavía, aunque dijo que este lunes comenzará una revisión en Puebla de los caminos: “Nos urge revisar rutas de evacuación y señalética”, apuntó.

Dijo que establecerá una coordinación directa con el gobierno del estado para la implementación de medidas de prevención, mitigación y preparación, enmarcadas en el Plan Operativo de Protección Civil del Volcán Popocatépetl.

Además, el Comité Científico Asesor, conformado por especialistas del Instituto de Geofísica de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), del Centro Universitario de Estudios e Investigación en Vulcanología de la Universidad de Colima y del Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred) se declaró en sesión permanente, para brindar información y análisis preciso a la CNPC.

Entre las acciones que ya lleva a cabo el Gobierno, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) dio a conocer que ante la nueva fase del volcán, personal de la Guardia Nacional, del Ejército y la Fuerza Aérea Mexicanos establecieron la coordinación con las autoridades de Protección Civil de los tres órdenes de gobierno, para conformar la Fuerza de Tarea Conjunta Popocatépetl.

A través de un comunicado, informó que participan tres mil 430 elementos de tres zonas militares, que se encuentran en situación de alerta, a los que se suman tres mil 125 integrantes de la Fuerza de Apoyo para Casos de Desastres, ubicada en el interior del Campo Militar No. 1-A, en la Ciudad de México.

Aseguró que, en caso de ser necesario, la Fuerza de Tarea Conjunta Popocatépetl aplicará de manera coordinada los planes de emergencia GN-A y Plan DN-III-E en sus tres fases (prevención, auxilio y recuperación), con el objeto de apoyar la evacuación de las comunidades que puedan verse afectadas.

Para ello, detalló, existen 42 rutas de evacuación que ya se encuentran establecidas (10 de Puebla, 20 del Estado de México, siete de Tlaxcala y cinco de Morelos), mediante las cuales se podrá evacuar oportunamente a 127 mil 114 personas de 51 comunidades de los estados de Puebla, Estado de México, Tlaxcala y Morelos que se consideran como población en riesgo.

La Coordinación Nacional de Protección Civil también mencionó que se instauraron 789 refugios temporales: 205 en Puebla, 109 en el Estado de México, 450 en Morelos y 25 en Tlaxcala.

Como parte de las acciones que se implementarán, la Secretaría de la Defensa Nacional anunció que este lunes, a las 12:30 horas del mediodía, realizará un simulacro en la comunidad de Santiago Xalitzintla, en el estado de Puebla, en el que participarán autoridades de protección civil de los tres órdenes de gobierno.

La actividad del Popocatépetl “está más viva que en el 2022”, advirtió el ingeniero civil Eduardo Ismael Hernández, profesor de la Facultad de Ingeniería Civil de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla, quien al recordar que desde 1994 el coloso ha sido estudiado por expertos no sólo en el país, sino en el mundo, señaló que las autoridades deben estar preparadas ante una posible explosión.

De acuerdo con datos del registro del Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred), Don Goyo ha registrado 819 exhalaciones, cuatro mil 838 minutos de tremores y 29 explosiones en la última semana, desde el lunes 15 de mayo, actividad intensa por la que ayer cambió su nivel de alerta Amarillo Fase 2 a Amarillo Fase 3, lo cual significa que hay explosiones con una magnitud que va creciendo, aunque aún no se contemplan evacuaciones.

De hecho, en las últimas 24 horas se detectaron 31 exhalaciones, mil 136 minutos de tremor y seis explosiones.

Acerca del peligro que representa el coloso, el experto advirtió que lo más preocupante es que la población no atiende llamados de autoridades para estar prevenidos ante cualquier contingencia.

“Se ha reportado caída de ceniza en los municipios de Puebla y Atlixco. En Tlaxcala se reportó moderada caída de ceniza en los municipios aledaños al volcán de la zona sur, pero lo preocupante es que de pronto los pobladores.

“En el afán de conservar sus propiedades, no atienden llamados del Gobierno para poder estar prevenidos en caso de una tragedia mayor”, dijo.

Apuntó que cada contexto volcánico es diferente y tiene una naturaleza distinta a lo que ocurre en Japón, por ejemplo; puede variar significativamente de lo que sucede en México, debido al tipo de suelo, así como de otros factores ambientales en las ciudades aledañas.

“Diario nos preguntamos cuál es esa probabilidad de que ocurra un evento mayor en el Popocatépetl".

“Se tiene historia de casos de volcanes en otros países, aunque la verdad es que, como en los sismos, no hay algo claro que haga predecir a exactitud estos fenómenos, pero lo que sí es predecible es el tema de tener un poco de conciencia respecto a los avisos de las autoridades”, dijo el experto.

El ingeniero agregó que hasta el momento se han habilitado albergues para evacuar a más de dos mil personas que viven cerca del volcán, pero la gente se resiste a ir a ellos por miedo a perder sus bienes materiales y, en ese sentido, el personal de apoyo no puede obligarlos a que se protejan.

Con esto coinciden otros especialistas, como el doctor Luca Ferrari, investigador del Centro de Geociencias de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), quien explicó a La Razón que el Volcán de Colima y el Popocatépetl “registran constantemente actividad que pone en alerta a las autoridades y, en el caso de éste último, aunque existen las rutas adecuadas, falta crear conciencia en la población para evacuar el área”.

“Tanto sismos como erupciones volcánicas no pueden predecirse, pero en las erupciones existen algunas características que estiman con mayor facilidad la posibilidad de actividad eruptiva.

“No es que nosotros podamos evitar la erupción, eso es algo que se dará naturalmente, y tampoco podemos decir cuándo va a ocurrir exactamente, pero los recursos que tenemos evitarán en gran medida que el daño ocasionado por la naturaleza se magnifique con las pérdidas humanas”, explicó.

Al referirse a la situación del Popo, el vulcanólogo Hugo Delgado Granados dijo a este diario que él y un grupo de investigadores han propuesto un patrón en el comportamiento del coloso.

“Más o menos cada 70 años el volcán se reactivaba, duraba un tiempo activo y después se volvía a dormir”, dijo.

La Secretaría de Salud recomendó a la población, sobre todo a los habitantes de Puebla, Morelos, Estado de México y Ciudad de México, no exponerse a la ceniza presente por el incremento de actividad del volcán Popocatépetl.

"Aun cuando el incremento de la actividad volcánica no significa necesariamente que habrá erupción, es indispensable —por la salud y la seguridad de las personas— contar con información oficial", indicó la dependencia federal.

Por lo que instó a los habitantes de la región a mantenerse pendientes de la información que emitan las autoridades y no creer ni propagar rumores.

El organismo señaló que la ceniza volcánica fresca puede ser áspera, ácida, arenosa, vidriosa, maloliente y completamente desagradable.

Explicó que aunque los gases normalmente se encuentran demasiado diluidos y no son un peligro para una persona sana, la combinación de gases ácidos y ceniza puede estar presente a kilómetros de la erupción y causar daños pulmonares a la niñez, personas adultas mayores y con enfermedades, incluyendo quienes sufren de enfermedades respiratorias graves.

"Este recubrimiento ácido desaparece fácilmente con la lluvia, pero puede arrastrar y contaminar las reservas de agua local. La ceniza ácida también puede dañar la vegetación y las cosechas en la región", agregó la Secretaría de Salud de México.

Durante la madrugada de ayer, una gruesa capa de ceniza del volcán Popocatépetl cubrió al menos una docena de municipios, entre ellos la zona conurbada de la ciudad de Puebla.

Las calles, avenidas, viviendas y automóviles amanecieron cubiertos de ceniza, lo que sorprendió a miles de habitantes, quienes compartieron en redes sociales las imágenes y videos.

Lo anterior se debió a que en los primeros minutos de ayer el Popocatépetl presentó una emisión de vapor de agua, gases y ceniza, acompañada de lanzamiento de material incandescente.

Por la mañana, autoridades estatales informaron que personal directivo del Aeropuerto Internacional Hermanos Serdán de la ciudad capital decidió cerrar la terminal aérea, debido a la caída de ceniza y que esta situación se mantendrá hasta nuevo aviso.

En la ciudad de Puebla se suspendieron todas las actividades al aire libre, entre ellas varias carreras atléticas programadas para este domingo.

Por la tarde, el gobernador de Puebla, Sergio Salomón Céspedes Peregrina, enfatizó: “Estamos en estado de alerta, no de alarma”, al hablar de la actividad del volcán Popocatépetl.

El mandatario llamó a la población a mantenerse informada por medio de los canales oficiales del estado y a “no caer en rumores y noticias falsas”.

Además, el gobernador hizo un llamado a los empresarios del estado para que regresen a las actividades home office en lo que se normaliza la situación.

Un poco antes, el Gobierno de Puebla emitió un comunicado en el que informó que “en un total de 40 municipios se suspenden actividades presenciales en escuelas, mismas que aplicarán el modelo de educación a distancia, hasta nuevo aviso”.

Mencionó que los tres órdenes de gobierno mantenían una revisión permanente de las 42 rutas de evacuación de los cuatro estados del país ubicados alrededor del Popocatépetl.

En tanto, la Comisión Ambiental de la Megalópolis emitió un comunicado, en el que señaló que “en la región de Puebla y Tlaxcala, la calidad del aire registrada hoy (ayer) continúa como extremadamente mala”.

Y aclaró que “para el Valle de México, la calidad del aire por las partículas mayores a 10 micrómetros seguirá siendo aceptable”.

Al respecto, la secretaria del Medio Ambiente de Puebla, Beatriz Manrique Guevara, dijo durante la conferencia de prensa vespertina que había partículas PM10 en 122 g/m, cuando lo recomendado es de 70 g/m. Dijo también que las partículas PM 2.5 se encontraban en 112 g/m, mientras que lo recomendable es 41 g/m.

Por la mañana, un reporte indicaba que el riesgo para la salud era extremadamente alto, ya que en el aire se encontraban partículas menores a 10 micrómetros, las cuales son fáciles de aspirar.

De acuerdo con la Red Estatal de Monitoreo Atmosférico (REMA), cuatro de las cinco estaciones de vigilancia registraban ayer un riesgo de exposición al aire libre, y en una de ellas, la situación era “preocupante”, puesto que se reportaba un ambiente atmosférico “demasiado malo”.

Se trata de la zona cercana al Benemérito Instituto Normal del Estado “Gral. Juan Crisóstomo Bonilla”, lo que abarca la colonia La Paz, avenida 15 de Mayo, calle 21 Norte, Avenida Hermanos Serdán, recta a Cholula, calle 23 Sur, entre otras vialidades aledañas.

En tanto, en las estaciones de Agua Santa y Parque de las Ninfas, a las cuales corresponden el Centro Histórico de Puebla, Las Ánimas, San José, Vista Hermosa, Lomas de Angelópolis, Castillotla y áreas aledañas, la calidad del aire era “muy mala”.

Instalan albergues. Autoridades de Puebla informaron de la habilitación de 205 refugios para ser utilizados en caso de que se presente una contingencia mayor y sea necesario evacuar comunidades, lo que hasta ayer se descartaba.

Protección Civil indicó que en caso de que se lleven a cabo labores de evacuación, éstas estarían coordinadas desde la 25 Zona Militar, con sede en la ciudad de Puebla.

Por lo pronto, las autoridades de Protección Civil recomendaron a la población en general permanecer en espacios interiores y acudir al médico si presentaban síntomas respiratorios o cardiacos.

La Coordinación Nacional de Protección Civil de México informó ayer, que el semáforo de alerta del volcán Popocatépetl, pasa a amarillo fase tres. Este nivel se activa tras la presencia de pluma de vapor de agua y gas, con una ligera caída de ceniza en áreas cercanas. La erupción subpliniana es un evento de moderado a grande caracterizado por una columna eruptiva menor a 20 km. PC recomienda permanecer el máximo tiempo dentro de casa en las áreas cercanas al volcán, cubrir nariz y boca al salir, limpiar ojos y garganta con agua pura, utilizar lentes de armazón en vez de los de contacto para reducir la irritación ocular, y cerrar ventanas y puertas, o cubrirlas lo más posible.