Espectáculos

Temporada de campo, un acercamiento al mundo vaquero

El documental permite conocer la vida de un niño llamado Bryan, quien vive en el rancho La Punta; llega a salas mexicanas el 4 de agosto
  • Por Redacción

Temporada de Campo, ópera prima de la directora mexicana Isabel Vaca, es un documental que hace un acercamiento al mundo de los vaqueros desde la mirada inocente de su protagonista, Bryan, un niño que vive, sueña y respira campo. El largometraje no pretende tomar una postura con respecto a las prácticas ganaderas, ni a la tauromaquia, pero, para la realizadora y el productor de la cinta, Arturo Mendicuti, es una oportunidad perfecta para que el público conozca más de cerca este mundo.

Los hechos tienen lugar en el rancho La Punta, lugar donde la cineasta creció y tuvo la oportunidad de conocer a Bryan y a su familia.

En entrevista para La Razón, Isabel Vaca detalló cómo fue que surgió su inquietud por llevar a cabo este documental: “Mi familia tiene un rancho de toros de lidia desde hace 25 años y crecí ahí, por eso crecí tan cercana a este mundo del campo, de los animales y de los vaqueros. Conforme fui creciendo me di cuenta que es una profesión que admiro y respeto mucho, y que me encanta todo este ritual que hay en torno a los vaqueros, que es como una tradición que va de generación en generación”, dijo.

Compartió que desde un inicio conectó con Bryan. “Me pude identificar mucho con cómo era yo de chiquita y cómo también me gustaba el campo y los animales. Me empezó a compartir el tema de su papá, la escuela y poco a poco fui construyendo una historia de todo lo que él me iba compartiendo”, agregó la directora, quien presentó el documental en el pasado Festival Internacional de Cine de Morelia, donde fue galardonado con el Premio del Público.

Arturo Mendicuti aseguró que se acercaron a Bryan y a su familia con mucho respeto y que siempre fueron muy claros con lo que tenían planeado contar: “Creo que la base estuvo en la honestidad y en el respeto. Isabel siempre le dijo lo que quería hacer, cómo lo quería, de qué iba a tratar la película y por qué la queríamos hacer”, comentó el productor a este diario. Además apuntó que cuando terminaron de rodar el documental, todo el equipo de producción ya era amigo del niño: “Eso ayudó mucho a poderle involucrar cada vez más en su película, en su historia, y para que él también se abriera con nosotros”.

Tanto la directora como el productor dijeron que el documental no busca fomentar ningún tipo de postura respecto a la práctica de los vaqueros o la tauromaquia, pero sí creen que es importante que se conozcan ambas partes para tener un juicio más claro.

“Escuchábamos algunos comentarios que ellos hacían sobre la gente que no está de acuerdo con los toros. De hecho hay una escena, que es de las pocas que tenemos de entrevista en cámara, donde Bryan nos deja muy en claro su punto de vista. Lo resumiría a que él lo que quisiera es que la gente pudiera ver los dos lados de la moneda, no que sólo se quedaran con uno, y a partir de ahí decidan si les gusta o van a estar en contra”, dijo Mendicuti.

Además, la cinta aborda temas como la violencia y la migración, todo desde la perspectiva de Bryan, quien vive en una realidad en la que este tipo de sucesos son comunes.

Vaca comentó que la historia se iba modificando conforme conocía aspectos de la vida del menor: “El documental comienza desde cero en la sala de edición, porque tienes 40 horas de material que se pueden contar de 200 formas distintas, pero tuve la suerte de trabajar con Valentina Leduc, una gran editora, y me dio mucha paz”, concluyó la directora.

Comentarios